Esta es la época del año en la que estás buscando el jardín, un colegio o universidad para matricular a tus hijos, El Algarrobo Propiedades te comparte algunas razones que te convencerán de que vivir en un barrio tranquilo y cerca del establecimiento que elijas es una de las mejores decisiones que puedes tomar.
Poder llevar a tus hijos caminando o que ellos lo hagan tranquilamente a pie o en bicicleta mejorará –y no sabes hasta qué punto– su calidad de vida, se ahorrarán los tacos de las horas pick y el estrés, tus hijos tendrán madrugar menos y además, es una opción muy respetuosa con el medio ambiente.
Comodidad es calidad de vida. Cuando no tienes que preocuparte por los tacos, el estacionamiento o la gasolina, aprovechas de hacer ejercicios y hacer un alto en el estrés del trabajo que puede afectar tu día, impactará positivamente en tu salud y también en la de tu familia, vivirán más tranquilos y saludables.
Adiós al auto y a los tacos
Sin duda, una de las ventajas más evidentes es que evitamos la dependencia del auto. Ya que en un corto paseo de no más de cinco minutos e incluso menos podemos plantarnos en el centro escolar de nuestros hijos. De esta manera, además de ahorrar dinero en gasolina, evitamos sacar el vehículo del garaje y circular durante varias calles hasta el colegio. Recuerda, no solo hay que lidiar con el tráfico, sino que luego –y para colmo– hay que encontrar estacionamiento.
Aunque es posible que seamos de los que optemos por el transporte público como medio de locomoción para llegar al colegio, en este caso también las ventajas son evidentes porque nos evitaremos las prisas por llegar a la parada a tiempo, los empujones y el abarrotamiento de gente propio de estas horas.
Madrugar menos y despertar con luz natural
Otro de los inconvenientes de tener el colegio lejos de la vivienda familiar es la necesidad de tener que levantar a los pequeños horas antes para poder llegar a tiempo. De hecho, emplearán más tiempo para el desplazamiento les obliga a madrugar. Así, es posible que lleguen más cansados y desganados e incluso algunas veces sin apenas haber podido desayunar correctamente. Una desventaja de la que nos libramos si tenemos en centro escolar bien cerquita de casa.
Un trayecto que pueden realizar ellos mismos sin compañía de nadie
Otro de los beneficios de la cercanía con el centro escolar es que nuestros hijos, llegada una cierta edad, podrán hacer el recorrido por ellos mismos sin necesidad de que los acompañemos dada su cercanía y lo bien que se conocen el camino. Por lo tanto, fomentamos su autonomía, algo que siempre es positivo en el desarrollo del niño.
Menos contaminación
Un último aspecto que no podemos despreciar es que si no tenemos que emplear el vehículo para los desplazamiento no solo ahorraremos en gasolina, sino que también evitaremos contaminar con el CO2 y gases nocivos que emanan de nuestros coches. Por lo tanto, estamos ante otro factor que, sin duda, decanta la balanza hacia las viviendas localizadas en las proximidades de los centros educativos.
Los amigos de tus hijos son tus amigos
No hay nada mejor que poder tener a tus hijos divirtiéndose en casa con sus amigos, por eso, cuando vives cerca al colegio de tus hijos, tu hogar podrá ser el punto donde todos se reúnan y construyan amistades de por vida.
Seguridad y colaboración
Estar cerca del colegio de tus hijos significa que, probablemente, los hijos de tus vecinos también vayan al mismo colegio. Gracias a esto podrás crear grupos de apoyo para recogerlos del colegio en las tardes o para reaccionar en cualquier urgencia
Más tiempo en familia
Menos tiempo en desplazamientos se traduce en más tiempo juntos para compartir momentos de calidad y construir familia
Sus hijos no tendrán tiempo solo para hacer tareas
Cuando los tiempos de desplazamiento hacia el colegio son muy largos, solo queda tiempo para hacer tareas y dormir. Por el contrario, cuando los niños tienen más tiempo en la tarde, podrán realizar alguna actividad extracurricular que disfruten como natación, danza o pintura.