Nuestra red de agentes inmobiliarias asesora y acompaña en su búsqueda a compradores e inversores, siempre preparadas para enfrentar nuevos escenarios financieros y poder adaptarse a las tendencias en constante evolución.
En un escenario dinámico de oportunidades y transformaciones, el mercado inmobiliario en Chile está experimentando una serie de cambios que marcarán el rumbo durante el año en curso. Según informes de expertos, diversas fuerzas están moldeando el panorama del sector, desde el tipo de propiedades más demandadas hasta las preferencias financieras de compradores e inversores.
Auge en la demanda residencial y subsidios gubernamentales
El crecimiento urbano acelerado y el aumento poblacional están generando una alta demanda por viviendas residenciales. El gobierno está respondiendo a esta necesidad ofreciendo subsidios a la clase media para la adquisición de viviendas, lo que está fortaleciendo aún más el mercado inmobiliario.
Digitalización, eficiencia y comodidad en la búsqueda de propiedades
La tendencia hacia el uso de plataformas en línea para la búsqueda y reserva de propiedades está en ascenso. La eficiencia en el tiempo y la capacidad de comparar diferentes opciones están atrayendo a un número cada vez mayor de compradores e inversores. Plataformas en línea y tecnologías como la realidad virtual están simplificando el proceso de búsqueda y selección de propiedades.
Enfoque en eficiencia energética y materiales ecológicos
La demanda por propiedades sustentables sigue creciendo, con un interés particular en la eficiencia energética y el uso de materiales ecológicos. La certificación LEED y la preocupación por el impacto ambiental están influyendo en las decisiones de compra e inversión.
Adaptabilidad: Espacios de trabajo y vivienda
La tendencia hacia el trabajo remoto está impulsando la demanda de espacios de trabajo flexibles y viviendas que se adapten a esta nueva realidad. La versatilidad en los ambientes habitacionales se ha convertido en una prioridad para muchos compradores e inversores.
Expansión y descentralización
Nuevas urbanizaciones, concebidas como ciudades secundarias, están ganando protagonismo debido al ahorro y la mejor calidad de vida que ofrecen, convirtiéndose en excelentes alternativas para invertir en ellas, ya sea para uso habitacional, estacionamientos o bodegas y son excelentes para invertir en ellas.
Las áreas de desarrollo inmobiliario que ofrecen alta liquidez, buena rentabilidad y numerosas oportunidades laborales, educativas y de salud en Santiago es estos momentos son:
- La Cisterna, donde llama la atención su infraestructura en constante crecimiento, plusvalía en aumento y demanda constante de alquileres, con espacios comunes atractivos.
- San Joaquín se presenta como una opción equilibrada entre modernidad, comodidad y conciencia ambiental, con acceso a servicios, transporte público y opciones de entretenimiento.
- Estación Central ofrece ventajas en términos de rentabilidad, gracias a su ubicación estratégica y conexiones de transporte, además de una activa actividad comercial y cercanía a centros de salud y educación.
Volatilidad financiera y nuevos tipos de financiamiento
Es crucial que los inversores estén atentos a factores como las tasas de interés y la inflación. Cuando el Banco Central aumenta la tasa de interés, el costo del financiamiento, incluidos los créditos, se eleva y, para la adquisición de una propiedad.
Además del crédito hipotecario, existe la opción de «arriendo con compromiso de compra”, un contrato que permite arrendar una propiedad con la posibilidad de adquirirla al finalizar el acuerdo. Otras opciones incluyen los mutuos hipotecarios, ofrecidos en UF que se financia con letras hipotecarias, endosables y no endosables. También el crédito directo de algunas inmobiliarias y el aprovechamiento de subsidios habitacionales.
Aunque el crédito hipotecario sigue siendo una opción viable, los consumidores deben comparar tasas y considerar diversos factores financieros antes de comprometerse. El proceso de solicitud de un crédito hipotecario implica una simulación inicial seguida de una cotización detallada por parte de las financieras, que debe respetarse por al menos 7 días según la ley del consumidor.